Estamos en el mes designado “de la Patria”, debido a la independencia que obtuviera nuestra nación de España, y se proclamara el acta respectiva el 15 de septiembre de 1821.
Durante este mes cívico, las escuelas y colegios hacen murales, decoraciones y actos alusivos a la nación y sus próceres; en cada acto cívico se canta el himno nacional para darle más sentido patrio a la celebración. Piense por un momento que hay miles de miles de niños y jóvenes en todo el país, declarando a través del himno nacional: “Serán muchos Honduras tus muertos…”, mientras las muertes violentas y accidentes con derramamiento de sangre, proliferan.
Quiero instarle en este día y en este mes a que usted declare “Serán muchos Honduras los que vivan”. Lo que nosotros proclamamos tiene autoridad y poder, por eso debemos declarar la vida, por eso hemos de confesar que los hondureños vivirán, no sólo con la vida física biológica, sino también con la vida del Espíritu, que es la vida eterna.
Mientras seguimos declarando la “Vida” para nuestra nación, para los hondureños, clamemos que sea cambiada la letra del himno nacional, para que este sea verdadera y genuina bendición para la patria.
Si usted se ha percatado de esto y está dispuesto a proclamar la vida, para usted "Hay Una Esperanza"; este día yo declaro la vida eterna, la vida abundante sobre mis queridos lectores y sobre cada ciudadano de mi país.
