TEMAS DE OPINIÓN

El Dinero

Noviembre 10, 2015


Hace un tiempo atrás yo tenía algunas pequeñas empresas, que tenían una buena rotación financiera; por lo que el banco con el que trabajamos se deshacía en atenciones con nosotros.  Un buen día decidí venderlas, para tener disponibilidad completa de servir a Jesucristo, razón por la cual la cuenta bancaria se redujo a lo indispensable; para mi sorpresa, y por un error de posteo del banco, a mi hijo le devolvieron un cheque personal que yo le había girado, por Lps. 500.00.  Fue una excelente enseñanza para darme cuenta que delante de los hombres uno vale lo que tiene, pero delante de Dios se vale por lo que en Él somos.

El dinero es un medio para adquirir los artículos necesarios para nuestro sustento y quizás algunas comodidades; sin embargo, la sociedad lo ha convertido en un ídolo, el dios Mammon, tiene atadas a muchas culturas en el materialismo, y les impide buscar su realización espiritual.  El poder adquisitivo se ha convertido en la medida de status, importancia, fuerza y poder. 

El hombre entre más tiene, más quiere, pero nunca está satisfecho, pues el afán por obtener dinero y comprar "cosas" con él, se convierte en una cadena tan fuerte, que los mantiene cons­tantemente esclavizados, ligados a una cuenta bancaria,  tarjetas de crédito por pagar, deudas y cuentas pendientes.

Nuestra sociedad de consumo se ha convertido casi en un mundo descartable; cada día los artículos son de inferior calidad, menos duraderos, la moda varía cada mes imponiendo a las personas un cambio en su vestuario, en fin... vivimos para gastar, vivimos para trabajar, en lugar de trabajar para vivir, la razón es la presión económica.  Las marcas reconocidas se han convertido en un ídolo también, y en una causa de competencia, entre amigos y compañeros de trabajo.  Algunos padres de familia sacrifican un tiempo de comida o dejan de comer carne durante una semana, por comprarle unos tennis "Nike" a su hijo.

Es posible mi querido lector, que usted mismo no soporte la presión que la competencia social le ha impuesto; quizás ya tiene dispuesto como va a gastar el aguinaldo que aún no ha recibido.

En este día le animo a sacudirse todo yugo impuesto sobre sus hombros, le motivo a ver el interior de su corazón y reconocer cuan rico o pobre es, dependiendo de lo que en su corazón hay: Si tiene a Jesús vivo en usted, usted es la persona más rica de todo el universo; si tiene posesiones materiales, sueños de futuros negocios o adquisiciones por hacer; siento decirle que usted es pobre y no tiene nada aunque tenga mucho materialmente, porque esas riquezas se corrompen y desaparecen con el tiempo.

Si sabe que necesita confrontar esta realidad, si cree que necesita ser rico eternamente, para usted Hay Una Esperanza. Levante sus ojos al invisible y dígale al Espíritu Santo de Dios cuánto necesita Su presencia en su corazón. Él es el mayor Tesoro, toda prosperidad verdadera proviene de Él. 

Ver Todos los Artículos