Mayo 20, 2019
Unos de los laboratorios cosméticos que más éxito han tenido en cuanto a venta y demanda de sus productos, son aquellos dedicados a la investigación y producción de cremas y aceites antiarrugas o rejuvenecedores. De igual manera, los tintes de mayor venta son aquellos diseñados para cubrir los cabellos grises que asoman en las sienes de los caballeros o a lo largo de la cabellera de las damas, arriba de cuarenta años.
Sin duda alguna, en la ciencia médica, son los cirujanos plásticos los de más alto ingreso; debido también a las reconstrucciones faciales para hacer un levantamiento de piel, estirarla y luego adherirla como si hubiesen desaparecido diez años del rostro de la persona.
La pregunta es ¿Por qué la persona natural tiene tanto temor a envejecer físicamente? ¿Por qué se asocia arrugas físicas y canas con decadencia o con incapacidad? ¿Por qué permitimos que la sociedad imponga sobre nosotros sus patrones y sellos de que la madurez en años representa vejez y por tanto ya no sirve, o más bien estorba?
Quisiera que meditáramos por un momento que la vida no depende ni de la piel ni del color del pelo. Deseo que hoy pueda recibir en su corazón el concepto fundamental de que la vida proviene del espíritu, del hombre interior; que cuando el varón o la mujer son llenos del Espíritu Santo de Dios, esa vida se genera y fluye hacia el exterior del hombre; que mientras el cuerpo físico, el hombre exterior, el tabernáculo temporal se va desgastando, el hombre interior va cobrando un cada vez más excelente peso de gloria.
Para el hombre lleno de la VIDA de Dios en su espíritu, los años sólo transcurren para darle más Vida, más sabiduría, más visión, más fuerza, más madurez en el amor.
En la medida que la cáscara que nos cubre se va añejando, el fruto interior va madurando y alcanzando su grado óptimo para convertirse en alimento agradable, dulce, edificante a las otras personas.
Si es usted uno de los que se había estado preocupando porque los años transcurrían y se estaba poniendo viejo; ¡HAY UNA ESPERANZA! Recuerde hoy que Cristo en el interior del hombre, vino para darnos Vida y Vida en abundancia.
