Mi querido lector, te escribo desde México D.F., donde estamos con mi esposo y nuestras dos hijas, de regreso después de varios días de ministración en el estado de Tabasco.
Una de mis hijas tenía el deseo de experimentar a patinar sobre hielo; nos comentaron que en el Zócalo habían instalado una pista de hielo, de manera que fuimos hacia allá. Para nuestra sorpresa se trata de la pista de patinaje más grande del mundo, pero además, todos nos quedamos muy sorprendidos porque, no tuvimos que pagar nada, el ingreso era totalmente gratis, le prestaron patines de la mejor calidad, le dieron calcetines desechables, le ayudaron a colocarse los zapatos patines, a amarrarse los cordones y todo lo demás.
Quiero que sepas mi querido lector que un día, ocurrió el evento más grande e importante del mundo, ese hombre maravilloso derramó Su sangre por ti, te dio vida a través de Su muerte, te dio sanidad y prosperidad y todo fue absolutamente gratis.
El paquete de salvación y liberación es totalmente tuyo, sin tener que pagar nada por ello, con solamente tú creerlo y desearlo.
Hoy es un excelente día para tomar ese regalo gratis para ti, de manera que estés listo (a) para comenzar un nuevo año lleno de vida, de salud y prosperidad integral.