Hola mis queridos lectores, espero que se sientan muy bien este día.
Quiero comentarles acerca de algo que pasó en uno de nuestros viajes misioneros hace más de un mes, más precisamente a finales del mes de marzo; estábamos mi esposo y yo compartiendo en una iglesia el sábado 21 de marzo por la tarde, en la ciudad de Londres. La congregación es hispana, pero en medio de todos ellos se encontraba un inglés, de unos cincuenta y pico años de edad.
Al momento de hacer yo un llamado, el primero en pasar para recibir oración y ministración fue el hombre inglés; oramos por él y mi esposo le dio un fuerte abrazo.
Han pasado unos cuantos días de ese incidente, pero ayer recibí una carta de la pastora, donde me contaba que este hombre inglés ha tenido un gran cambio en su vida, que el abrazo que recibió de parte de mi esposo, le bendijo de una manera tal, que siente mucha sed por Dios.
Es increíble como un abrazo puede transferir amor de una persona a otra, como el toque de Dios a través nuestro, es capaz de despertar el espíritu de muchos.
No sé si lo has experimentado, pero espero que lo creas y sepas que para ti Hay Una Esperanza, Dios puede tocarte en directo, o bien a través de uno de los miles de instrumentos que Él tiene alrededor del mundo entero. Hoy puede ser tu día.