Qué bueno es tener la oportunidad de comunicarme nuevamente con ustedes, mis queridos lectores de esta su columna semanal. Deseo que se encuentren disfrutando de todas las bendiciones de nuestro Buen Padre.
Quiero comentarles acerca algo muy especial; hace unos días mi esposo me preguntó ¿Qué habrá sido de aquel joven que nos atendió en Cuba y manejó para nosotros cuando íbamos a compartir? Estuvimos recordando aquellos tiempos, hace varios años ya; y luego lo olvidamos; pero Dios no lo olvidó.
Hace unos tres días recibimos un correo electrónico de este joven llamado Rubén y su esposa cuyo nombre es Ania; resulta que hace unos meses se han trasladado a los Estados Unidos, donde están sirviendo a Dios. De alguna manera él nos localizó, quizás alguno de los libros que le dejé en Cuba tenía nuestro correo, no lo sé, pero Dios puso en el corazón de ellos contactarnos.
Además, quiero compartirles que hace unos tres años conocí a una persona en Atlanta, ella se llama Helen, es de ascendientes chinos y es una empresaria exitosa. Hace tres días ella me llamó para comentarme que Dios le abrió una puerta importante en una radio emisora en su ciudad, la cual está conectada a sesenta radios más, que tienen una audiencia de 500,000 personas; que ella pensó en mi para hacerme una entrevista por la radio para lanzar al aire un programa vía teléfono. Ayer se llevó a cabo la entrevista; y aunque el programa dura solamente media hora, de manera especial nos lo extendieron a una hora, lo cual fue de gran bendición para miles de radioescuchas.
¡Parece que este es un tiempo determinante! Dios está activando las conexiones divinas que Él ha propiciado. Hay muchos encuentros que uno tiene en la vida, que son casuales; pero hay otros que están ordenados desde el cielo, esos son los que producen fruto, porque tienen un propósito en la eternidad de Dios. Muchas cosas suceden para que encajemos unos con otros dentro del diseño divino; esto ocurre también en relación a los matrimonios.
Dile al Señor que tú quieres encontrarte con las personas que están dentro de Su voluntad para cumplir un propósito, te aseguro que para ti Hay una Esperanza; cosas comenzarán a activarse y conexiones van a suscitarse.
Este día comienza a bendecir a las personas que has conocido, que aún no has visto el cumplimiento del propósito, pero que Dios si lo sabe y conoce. Cuando tú lances bendición sobre ellas, algo empezará a manifestarse.