Queridos lectores les saludo con mucho cariño deseando para ustedes lo mejor en este año que comienza.
Siempre que comienza una nueva época en nuestro calendario todos tenemos la tendencia a iniciar proyectos, o a comenzar dietas o bien nos proponemos a realizar cambios en nuestra rutina o curso de la vida diaria.
He escuchado por todos lados que muchas personas están atemorizadas por lo que algunos han profetizado acerca de la repercusión del alineamiento de los astros que se espera ocurra en el 2012. El temor o miedo no es buen amigo de nadie, porque este más bien atrae situaciones negativas en la vida de las personas.
Estoy convencida que debemos vivir cada día como si fuera el último. Es nuestra responsabilidad estar preparados como si hoy fuéramos a darle cuentas a Dios por nuestra vida.
Si han estado preocupados porque el mundo se va a terminar; si les asusta pensar que no van a conocer a sus nietos o no van a ver a sus hijos graduarse o casarse; no se preocupen que también para ustedes Hay Una Esperanza.
Me atrevo a recomendarles mis queridos lectores, que usen este tiempo de determinaciones y decisiones para buscar la paz espiritual, para buscar a Dios, nuestro Creador y Padre, para tener paz y reposo cada día, a pesar de los presagios dados. El deseo de nuestro Señor es que nosotros los seres humanos encontremos paz en medio de la tribulación del mundo; que conozcamos la paz profunda y verdadera, para que vivamos reposados y tranquilos, sabiendo que Él tiene cuidado de nosotros. Nuestro Dios y Padre envió a Su hijo Jesucristo a morir por nosotros para que en Él podamos tener vida eterna y abundante.
No necesitas buscarlo en un lugar especial, lo puedes encontrar muy cerca de ti, solamente háblale, Él está esperando que tú abras tu corazón para ocupar el lugar que le corresponde.
Este día te invito a echar toda ansiedad sobre tu Dios, para que a cambio recibas Su paz, Su gozo, Su vida.
Deseo para ti mi querido lector, un año 2012 lleno de armonía, de paz, de alegría; declaro que el año que comienza será un tiempo de oportunidades para que veas tu bendición, tu salud, tu prosperidad.
