Mis queridos lectores les saludo cariñosamente deseando para ustedes lo mejor en todas las áreas de su vida, hoy y siempre.
Quiero comentarles algo que quizás sea de ayuda para muchos de ustedes; escuchaba una conversación entre una pareja de esposos, quienes han estado casados por casi treinta años. Ella le expresaba a él que sentía gusto en cuidarlo, a lo cual él le respondió ¿Y es que acaso tú me cuidas? Ella se sintió confundida ya que en su conciencia y en su mente, estaba segura de haberlo cuidado durante todo el tiempo de casados. Ella comenzó a decirle, “pues yo considero que sí te cuido, te cuido espiritualmente en oración, para que seas bendecido y vivas en salud y prosperidad, para que el Señor te libre de tentaciones, para que tengas una vida plena”; mientras él la miraba con una sonrisa casi burlona, ella siguió hablando, “te cuido emocional y mentalmente, procurando que te sientas tranquilo, que las situaciones a tu alrededor sean de bendición y gratas para ti…” mientras él mantenía su gesto en la cara, ella siguió diciendo “te cuido físicamente, trato de que te alimentes de forma saludable y nutritiva, que tengas tu ropa limpia y en orden…”.
La muda respuesta de él, hablaba más que mil oraciones, definitivamente él estaba muy seguro de que ella no lo cuidaba. Entonces ella le preguntó, pero dime entonces en qué he fallado? porque todos estos años yo he estado creyendo que he estado haciendo lo correcto y ahora tú me dices que no ha sido así.
Mis queridos lectores, que triste situación en la que se puede caer, cuando la forma de expresión entre los cónyuges no es efectiva, cuando no existe una buena comunicación en la pareja. Que terrible es vivir engañados por tantos años, viendo las cosas desde una perspectiva, mientras el compañero tiene una apreciación diferente. Sin embargo, por difícil que parezca, siempre Hay Una Esperanza. Siempre hay tiempo para comenzar de nuevo en base a la transparencia y la verdad.
Si acaso esta fuera tu condición, te invito a abrir tu corazón para que el Espíritu Santo, Quien nos lleva a toda verdad, pueda dirigirte y enseñarte a expresarte de manera clara y efectiva; para que basados en el amor verdadero puedan ser claros y honestos el uno con el otro.
La única forma como podemos amar y recibir amor, es a través del Espíritu Santo en nosotros, Quien nos manifiesta el amor de Dios, porque ¡Dios es amor!.
