Queridos lectores, quiero contarles algo que quizás ya saben, pero por si acaso no, les comento: Recientemente las noticias internacionales captaron entrevistas de un hombre salvadoreño de un poco más de cuarenta años, quien hacía trece meses había naufragado en el océano pacífico que baña las costas de su país. Al aparecer y ser encontrado en una Isla de Japón, este hombre tenía barba larga, estaba un poco débil, pero realmente su condición no se veía precaria.
Por supuesto hubo muchas preguntas acerca de cómo pudo sobrevivir, sobre todo al darse cuenta que su compañero de viaje era un joven, quien no pudo soportar más de dos meses en alta mar, a la deriva.
Las respuestas eran de esperarse, este hombre tuvo que comer pescado crudo, beber agua lluvia y hasta su propia orina. Yo no puedo imaginarme como alguien de forma natural puede sobrevivir por más de un año en estas condiciones, en un pequeño barquito a merced de las olas, las tormentas y todo lo que ocurre en el Océano Pacífico.
Al observar yo el cuadro completo, me dije: Aquí tuvo que haber intervención divina, no es posible lograrlo de manera normal y natural. Obtuve mi respuesta cuando vi la entrevista que le hicieron a su madre, una mujer con temor de Dios y con una fe activa, quien nunca dejó de orar y de creer que el Señor guardaría la vida de su hijo y que este se salvaría.
Pienso en el corazón de esta madre, confiado en su Dios, sabiendo que obtendría respuesta, a pesar de que los días pasaban y no había indicios ni noticias de su hijo. Pero sabes qué mi querido lector? para el que tiene fe, siempre Hay Una Esperanza.
No sé lo que tú hayas perdido, tal vez no fue un hijo, quizás fue tu esposo quien se fue de casa y lo das por perdido; tal vez has perdido la alegría de vivir, o quizás se te ha ido la salud. Para todas estas situaciones Hay Una Esperanza y la certeza de que Dios responde y Él siempre quiere recuperar, restituir y restaurar.
Lo único que puede detener la mano de Dios de actuar, es tu incredulidad.
¿Cómo puedes entrar en una dimensión de fe para creer que aún lo imposible es posible? Solamente tienes que pedirle al Espíritu Santo que tome control de tu vida, que te llene plenamente, para que comiences a caminar en la Fe de Dios.
Puedo asegurarte que SÍ vas a recuperar todo lo que has perdido, porque sabemos que el diablo vino a matar, a hurtar y a destruir, pero nuestro Señor Jesucristo vino a la tierra para deshacer las obras del diablo. Por eso en Cristo si Hay Una Esperanza.