La vida nos depara muchas cosas hermosas pero rara vez las apreciamos; aunque cuando dejamos de vivirlas o de tenerlas, entonces las echamos de menos.
Tengo a alguien muy cercano a mi persona, una muchacha sumamente especial quien hace ocho años está con movilidad limitada, en una silla de ruedas, por una afección en su nervatura medular. Esta joven, no es amargada, sino que disfruta la vida, comparte con sus hermanos, honra a sus padres; tiene un trabajo donde la aprecian mucho y aún en esa condición, por un tiempo dirigía a los jóvenes de su Iglesia que pertenecían al grupo de danza. No solamente eso, sino que ha ido en dos ocasiones a congresos de adoración y danza en los Estados Unidos, viajando sola en avión.
Cuántas veces nosotros nos quejamos por un pequeño malestar, en lugar de apreciar todas las bondades de las cuales gozamos cada día. Cuán importante es mostrar gratitud a Dios por cada célula, cada tejido y cada órgano que tenemos funcionando correctamente.
Conocí a un hombre el fin de semana pasado, lleno de alegría, disfrutando con su esposa e hijito. Noté que él hacía esfuerzo para caminar y cojeaba de una pierna, sin que yo le preguntara, él se acercó y nos comentó que hace algunos años se había ido ilegalmente a los Estados Unidos a través de la frontera de México, donde perdió su pierna, arrollado por el tren. Es así que él ahora usa una prótesis, la cual lamentablemente es más grande que su pierna real, por lo que tiene que cojear.
Al ver el estado de ánimo de este hombre, nadie pensaría en lo que le acontece. Interesantemente, estos dos casos se tratan de personas que han conocido a Dios y han recibido Su inmenso amor. Definitivamente eso hace una gran diferencia.
Querido lector, si tú gozas de todos tus miembros y órganos, dales gracias a tu Padre Dios, pero si por alguna razón algo te faltara o no te funciona bien, también dale gracias a tu Padre, porque en medio de esa falta, puedes reconocer Su grandeza.
Si acaso te es difícil ser agradecido en medio de la dificultad, si no puedes ver a un Dios de amor a través de tu necesidad, puedo decirte que para ti Hay Una Esperanza, porque también en medio del dolor podemos conocer a un Dios Bueno que nos ama siempre.
