En nuestro país, Honduras, hay una ley que establece que los patronos den un aguinaldo o treceavo salario a sus empleados a mediados del mes de diciembre. O sea que durante ese mes, la gente que tiene un empleo fijo, recibe doble cantidad de dinero.
Nosotros administramos una Escuela y Colegio Bilingüe, privado; de manera que también nos corresponde pagar aguinaldos a nuestros maestros y demás empleados, pero por supuesto, para ello dependemos de que los padres de familia paguen sus cuotas respectivas.
Cualquiera diría que recibimos fluidamente el dinero para poder pagar a tiempo; pero hay un fenómeno y no es así, parece que las personas entre más dinero reciben, mas dinero gastan, aún más allá de sus ingresos.
Es posible mi querido lector que tú seas uno de esos que cae en la trampa del consumismo en esta época; quizás durante todo el año estuviste haciendo planes de comprar esto o aquello cuando recibieras ese dinero; a lo mejor cuando te llegó ya lo tenías comprometido o hasta gastado.
Quizás tú te das cuenta hoy que necesitas poner freno a tu compulsión por comprar, o bien, que necesitas la dirección de Dios y la templanza para no gastar más de lo que recibes.
Si tú te has dado cuenta de ello y reconoces que necesitas ayuda, para ti Hay Una Esperanza, te invito hoy a que abras tu corazón al Señor Jesucristo, el Dador de la vida, Quien a través de Su Espíritu Santo te enseñará todas las cosas y te va a dirigir a toda Verdad, a todo lo Bueno y lo Santo.
