La semana recién pasada estuvimos compartiendo la Palabra de Dios en Midland, Texas, pero luego nos trasladamos por tierra a El Paso, Texas y de allí hacia Ciudad Juárez, México. Es muy interesante la manera como las personas pasan continuamente por la frontera, las autoridades no piden un solo documento a las personas que entran a territorio mexicano.
Desde que ingresamos vía terrestre, pensé que podría haber alguna complicación, debido a que nuestra ruta de salida (regreso a casa) era por aire, desde Tabasco, donde seguramente nos pedirían la copia del documento que respaldara nuestro entrada a ese territorio.
Nos trasladamos de Ciudad Juárez hacia Villahermosa, Tabasco por avión, donde estuvimos tres días. Llegó el lunes por la mañana, y muy temprano nos presentamos al aeropuerto para nuestra salida de Tabasco a casa, vía Houston. Tal y como suponía, el señor que amablemente nos atendió en el mostrador nos hizo saber que no podía darnos nuestros pases de abordar, a no ser que antes resolviéramos con las autoridades de Migración lo del documento faltante. Estas oficinas en la ciudad las abren a las 8:00 a.m. y nuestro vuelo salía a las 7:10 a.m.
Esperamos a que abrieran las oficinas de Migración del aeropuerto, como a las 6:30 a.m., mientras tanto yo me fui a un baño para orar al respecto. Al abrir dicha oficina, mi esposo se presentá con la situación y le dijeron: Ustedes deberían de ir a la ciudad para que la oficina de Migración les hiciera este trámite, pero vamos a hacer nuestra buena obra del día, lo vamos a hacer nosotros acá. Por la gracia y el favor de Dios, ellos nos hicieron el trámite y pudimos salir sin problema y sin atraso.
Mi querido lector, quiero compartirte que cada día estoy más segura y más que convencida que nuestro Dios es muy Bueno y que tiene cuidado de cada uno de Sus hijos.
Quiero decirte que para ti también Hay Una Esperanza, lo único que debes hacer es abrir tu corazón para que Él reine, que Él gobierne, que Él sea tu Padre y tu Rey; entonces todas las cosas se tornarán a tu favor.